Me siento en un bar de Urgell y pido un "café americano". El yankee a monopolizado el término, con su ímpetu imperialista. Pero bien, yo soy americana, y tuve la ventura de conocer a otros dos.
Fui a tirarme bajo el sol, luego de mi caminata diaria, en un rinconcito con césped de la Barceloneta.
Y como Dios los cría, y el viento los junta; me senté a escasos dos metros de una chica joven, que estaba en igual situación que yo: procurando absorber un poco de sol en una tierra ajena. Al cabo de una hora de descanso y ensoñación, al voltearme yo vi que la mujercita sostenía un mate en la mano (y el mate es código de fraternidad) así que le pedí una cebada y pronto nos encontramos hablando de exilios autoimpuestos y de nostalgias.
Entre mate y mate fue ocultándose el sol, y vino la lluvia. Decidimos partir a buscar un techo y pocos metros después encontramos al paso a su novio, un mozito de ojos claros y mirada perdída. No hubo introducción ni silencios incómodos, seguimos camino los tres; sin meta pero con rumbo. Terminamos haciendo campamento a los pies del Mont Jüic, ante la mirada inquisidora de turistas que ya olvidaron el arte de hacer corro con pucho y picadas, entre suspiros y ensueños revolucionarios.
Así conocí a Gabriela y a Mike, una pareja de jóvenes uruguayos que vinieron a Europa a procurarse "una salida". Salida que es indefectiblemente, la puerta de entrada a una realidad que se va tejiendo en favor de nuestro nuevo sueño americano.
¿Queremos realmente seguir pagando a crédito, la necesidad que nos imponen? ¿No es el Destino el que junta a las almas afines? ¿No se huelen a lo lejos los visionarios y se juntan como viejos hermanos, a erigir los pilares del cambio? ¿Por cuánto tiempo seguiremos creyendo que estamos solos y que somos muy pocos y escasos, los que vislumbramos una alternativa para el Hombre?
Todo aquél que quiera aun, vivir sin sentido, víctima y verdugo de su propio nihil; conforme o vencido por la basura que nos vende la T.V. y el mercadeo; aquél que quiera aun, y prefiera, vivir por nada a morir por un ideal, por más inasequible que éste pueda parecer..., esa persona, digo yo (y que me exponga sus razones quien disienta), está muerta en vida, vencida de antemano, y es su condena la vegetación y la intrascendencia.
Porque este mundo, el único mundo, se alza por la fuerza visionaria de unos cuantos, y se sostiene con la fuerza resistente de otros tantos que deciden apoyar el sueño magnánimo de la justicia, que nunca será igualdad (populismo) sino ¡ecuanimidad!
** Coherencia: Decir lo que se piensa y hacer lo que se dice.
** Locura: Decir lo que conviene en lugar de lo que se piensa, y hacer lo que más cómodo resulte.
¿A quién llamás loco, hermano?
¿Creés acaso,
que cambiaré de opinión
sin estar
cabalmente segura,
de que una convicción
es la ruina
por la que he de elegir
mi muerte?
Fui a tirarme bajo el sol, luego de mi caminata diaria, en un rinconcito con césped de la Barceloneta.
Y como Dios los cría, y el viento los junta; me senté a escasos dos metros de una chica joven, que estaba en igual situación que yo: procurando absorber un poco de sol en una tierra ajena. Al cabo de una hora de descanso y ensoñación, al voltearme yo vi que la mujercita sostenía un mate en la mano (y el mate es código de fraternidad) así que le pedí una cebada y pronto nos encontramos hablando de exilios autoimpuestos y de nostalgias.
Entre mate y mate fue ocultándose el sol, y vino la lluvia. Decidimos partir a buscar un techo y pocos metros después encontramos al paso a su novio, un mozito de ojos claros y mirada perdída. No hubo introducción ni silencios incómodos, seguimos camino los tres; sin meta pero con rumbo. Terminamos haciendo campamento a los pies del Mont Jüic, ante la mirada inquisidora de turistas que ya olvidaron el arte de hacer corro con pucho y picadas, entre suspiros y ensueños revolucionarios.
Así conocí a Gabriela y a Mike, una pareja de jóvenes uruguayos que vinieron a Europa a procurarse "una salida". Salida que es indefectiblemente, la puerta de entrada a una realidad que se va tejiendo en favor de nuestro nuevo sueño americano.
¿Queremos realmente seguir pagando a crédito, la necesidad que nos imponen? ¿No es el Destino el que junta a las almas afines? ¿No se huelen a lo lejos los visionarios y se juntan como viejos hermanos, a erigir los pilares del cambio? ¿Por cuánto tiempo seguiremos creyendo que estamos solos y que somos muy pocos y escasos, los que vislumbramos una alternativa para el Hombre?
Todo aquél que quiera aun, vivir sin sentido, víctima y verdugo de su propio nihil; conforme o vencido por la basura que nos vende la T.V. y el mercadeo; aquél que quiera aun, y prefiera, vivir por nada a morir por un ideal, por más inasequible que éste pueda parecer..., esa persona, digo yo (y que me exponga sus razones quien disienta), está muerta en vida, vencida de antemano, y es su condena la vegetación y la intrascendencia.
Porque este mundo, el único mundo, se alza por la fuerza visionaria de unos cuantos, y se sostiene con la fuerza resistente de otros tantos que deciden apoyar el sueño magnánimo de la justicia, que nunca será igualdad (populismo) sino ¡ecuanimidad!
** Coherencia: Decir lo que se piensa y hacer lo que se dice.
** Locura: Decir lo que conviene en lugar de lo que se piensa, y hacer lo que más cómodo resulte.
¿A quién llamás loco, hermano?
¿Creés acaso,
que cambiaré de opinión
sin estar
cabalmente segura,
de que una convicción
es la ruina
por la que he de elegir
mi muerte?
3 comentarios:
que manera de pensar tan clara y firme de la usted. tiene tanta razon en casi todo..me es dificil discrepar, a pesar de vivir en una semi comodidad....
pero todavia mi alma no se ha vendido...
saludos...
Cómo que volvés, mi querida profetiza!?
te sigo leyendo amiguita y alimentando mi espíritu que de tanto en tanto decae, pero no lo suficiente para quedar en el camino. Un abrazo enorme Galita!!
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